"Este libro, contiene 366 ensayos para cada día del año... adopta sus gentiles lecciones, animate a vivir su verdad apasionada, y comparte este regalo extraordinario con cada persona que encuentres: tu Ser Autentico es tu alma hecha visible". Mi propuesta es sencilla, compartir los ensayos de "El Encanto de la Vida Simple" de Sarah Ban Breathnach, junto con mis propias reflexiones. A quienes quieran compartir mi viaje, bienvenidos! Simple Abundancia...

martes, 25 de enero de 2011

Un paso más: Alabar nuestras circunstancias


Alaba una cosa y te alabará.

Maldícela y te maldecirá...

Si alabas una situación,

no tiene poder para herirte y,

aunque pueda plantear problemas durante un tiempo,

desaparecerá paulatinamente,

si la alabas sinceramente.

Emmet Fox


"Después de aceptar nuestras circunstancias presentes, sean cuales sean, debemos aprender a alabarlas.... ¿alabar la desgracia? Apretando los dientes, si es necesario. Normalmente, desconocemos por qué algo ha ocurrido, y seguiremos sin saberlo hasta estar lo bastante distanciados como para analizarlo restrospectivamente." (Ban Breathnach)


Este paso es muy difícil, especialmente cuando estamos transitando una circunstancia complicada. En ese momento negro, nos parece que no hay salida. Que la vida siempre será tan oscura como hoy. Y sin embargo... no es así. El sol vuelve a brillar. Y nos reponemos de aquello que nos parecía imposible remontar. Y tanto dolor y angustia... ¿para qué?


La certeza de que las cosas no nos pasan porque sí, nos ayuda a serenarnos cuando estemos en medio del río. Necesitamos llegar del otro lado de cada etapa difícil de nuestra vida. Y una vez que nos hayamos repuesto lo suficiente como para mirar atrás, podremos entender cuál era el mensaje.


Hay veces que los golpes de la vida tardan mucho en sanar. Con la rapidez de nuestro mundo actual, ya no hay tiempo a veces ni para dejar que nos duela. Es más, ya no hay duelos visibles. Ya no nos vestimos de negro, cerramos las cortinas, y nos alejamos del mundo, para llorar a quien se fue. Antes, el mundo entero respetaba los ciclos de alegría, dolor y sufrimiento. No apuraba la felicidad a costa de no aprender las lecciones que esos dolores nos traían. Hoy tenemos que salir del generalizado "analfabetismo emocional" (Greenspan), que sólo nos tolera cuando estamos bien, alegres, fuertes. Aprender a armar nuestro espacio para llorar, gritar, escribir, romper o lo que sea que necesitemos hacer para transitar esos momentos difíciles, sin máscaras.


Es importante aprender a decir lo que nos pasa. Incluso a nosotros mismos. Que esto duele. Que nos quita fuerzas. Que ya no soy la misma/el mismo de antes que esto sucediera. Porque realmente, ya no lo somos. Mirian Greenspan nos dice en su libro Healing through the dark emotions: the Wisdom of grief, fear and despair (Sanando a través de los Sentimientos Oscuros: la Sabiduría del Dolor, del Miedo y de la Desesperación); que una vez que fuimos quemados por el dolor, el miedo o la desesperación, se produce en nosotros una alquimia emocional. Transformaremos dolor, miedo y desesperación, en gratitud, alegría y fe. "Pero estos regalos sólo podrán ser alcanzados una vez que bailemos la danza de las emociones oscuras" (Greenspan). ¿Bailamos?



lunes, 24 de enero de 2011

La vida real


"Todo lo que aceptamos realmente en la vida sufre un cambio"

Katherine Mansfield


En su libro "The Unfolding Now" (traducido como "la Presencia" en español), Almaas nos dice que quitemos nuestras manos de nuestra propia existencia. Que aprendamos a convivir con lo que me esta pasando, realmente, en este momento. No intentar cubrir el ahora con lo que yo quisiera que fuese, sino convertirme en una observadora de mi propia realidad. Qué siento realmente con esto que me está pasando.


"Mira a tu alrededor y percibe lo que está ocurriendo. Esta es mi cocina con el suelo sucio, este es mi peso, este es el saldo de mi cuenta corriente, aquí es donde trabajo ahora. Esto es lo que realmente esta pasando en mi vida en el momento presente. Esta bien. Es la vida real." Aceptación. "No rebelarse contra lo que hay: nuestras circunstancias, nuestros sentimientos, nuestros problemas, nuestra posición económica, nuestro trabajo, nuestra salud, nuestras relaciones con los demás, la demora de nuestros sueños" (Ban Breathnach).


Las madres tendemos a cubrir nuestras experiencias. Es fácil aceptar las situaciones que nos traen felicidad. Más difícil es conectarnos con la impotencia que nos provocan las circunstancias fuera de nuestro control. O los sentimientos "Negativos". Frustración. Enojo. Furia. Aburrimiento. Ahogo. A veces, estamos sin estar. Nuestro cuerpo esta ahí, cumpliendo con lo que tiene que hacer; pero nuestra mente y alma volaron lejos.


Es momento de volver a unir cuerpo y alma, y registrar las sensaciones y sentimientos reales que acompañan a nuestras experiencias. A veces, para cambiarlas. Si tomamos conciencia del aburrimiento que nos provoca nuestro trabajo, quizas podamos ver de qué otra forma ganar dinero. Si lo que sentimos más a menudo con nuestros hijos es fastidio, habra que mirar más detenidamente qué lo causa, y cómo transformar nuestra convivencia. Pero lo más insalubre es mentirnos a nosotros mismos. Creernos que somos madres perfectas (como las Mujeres de Stepford, esa película donde al final, las "esposas perfectas" eran robots), o los empleados impecables, o las mártires de nuestras familias.
Reconocernos es salud. Dejar de luchar con nuestra realidad, nos da energías. Y nos permite tomar decisiones más claras.

jueves, 20 de enero de 2011

Hectáreas de diamantes


Tus diamantes no se encuentran en montañas remotas ni en lejanos mares;
están en tu propio jardín, si los desentierras.
Russell H. Conwell




Russell Conwell narraba la historia de un agricultor persa llamado Ali Hafed quien vendió su granja y abandonó a su familia para viajar por el mundo en busca de fortuna. Buscó por todos lados; pero no logro encontrar sus ansiados diamantes. Finalmente, deseseperado y convertido en un vagabundo paupérrimo, terminó con su propia vida. Su búsqueda de riquezas lo había consumido. Mientras tanto, el hombre que le había comprado su granja estaba agradecido por cada brizna de césped que ahora le pertenecía y prodigaba amor y cuidados a su terreno. De noche, sentado a la mesa rodeado de su familia y cenando con su familia, era un hombre feliz. Un buen día hizo un descubrimiento asombroso. En su jardín, el que Ali Hafed había abandonado, había una mina de diamantes, literalmente una hectárea de diamantes. El simple granjero se convirtió en un hombre rico, más allá de sus sueños más descabellados.


Ban Breathnach pregunta: "¿Dónde está tu hectárea de diamantes? Si pudieras hacer cualquier cosa en el mundo, qué harías?... Abrirías una tienda; comenzarías una familia; diseñarías un vestido, escribirías un guión?...Todos tenemos una hectárea de diamantes esperando a ser descubierto, atesorado y explotado. Todos tenemos un lugar por donde empezar. Deja volar tu imaginación, porque será el mapa que tu alma necesita para tener éxito".¿No es fascinante saber que los ingredientes para nuestro éxito están al alcance de nuestra mano?
Primero hay que identificar nuestro sueño del alma. Esto a veces implica una búsqueda profunda en nuestro inconsciente, allí donde escondimos nuestros preciados diamantes. Una vez ubicado nuestro sueño, tenemos que cuidarlo con mucho esmero para que crezca, ya que es un brote recién nacido. Cuidemoslo de depredadores, internos y externos. Es importante reconocer quienes se oponen a nuestro sueño, por más cercanos y queridos que sean. Esconderlo si es necesario hasta que sea lo suficientemente fuerte para aguantar las críticas, los consejos "bien intencionados" (y los no tanto).


Hay que protegerlo incluso de nuestro propio crítico interno, esa voz que no cesa de decirnos que ni lo intentemos, que no somos lo suficientemente buenos para ese emprendimiento. Que mejor nos dediquemos "a lo que sí sabemos hacer", sea eso lo que sea. Quedarnos en lo que sabemos hacer, lo que nos resulta familiar, puede hacer que nos olvidemos incluso de cual era nuestro sueño.

En la película que vimos hoy, "Enredados", Rapunzel le pregunta a una banda de personajes bastante siniestros si ellos nunca tuvieron un sueño que quisieran alcanzar. El de ella, llegar a ver las luces que iluminaban el cielo cada año en su cumpleaños. Eran las luces que sus padres biológicos lanzaban al cielo con la esperanza que ella, la princesa perdida (secuestrada) volviera a ellos. Rapunzel de repente se reconoce a ella misma. Se acuerda de quien es... el resto los dejo para no arruinarles la historia si la quieren ver, vale la pena.


Es fundamental acordarnos de quienes somos, y quienes queremos llegar a ser. Una vez que esta hecha la pregunta: Cual es tu sueño? Todo puede pasar... Puede ser que un ladrón se convierta en pianista, o en príncipe, o en mimo.... y que una princesa recupere su corona, su reino y su familia. Sólo, si perseguimos nuestro sueño.

miércoles, 19 de enero de 2011

Simplicidad no es tan simple!


Es un don ser sencillo

es un don ser libre,

es un don llegar

adonde deberíamos estar.

Himno Shaker


Soy mejor madre en vacaciones. No lo somos todas? Sin presiones, sin apuros, sin tener que llegar a este y tal lugar a tiempo. No hay peleas por deberes cuando ya nadie tiene resto de paciencia. No hay horarios, más que los indispensables. Entramos en nuestro propio ritmo familiar. Y de a poco, bajamos las exigencias y las expectativas.


Hace un tiempo, decidimos que no queríamos seguir subidos al tren del eterno programa. Cuando yo era chica, ir al cine era algo especial. Es más, todavía me acuerdo (casi) de cada película que fui a ver, y con quien. Mis hijos habían perdido eso. Habíamos caído presos bajo el bombardeo de la oferta permanente de películas, fast food, nuevos juguetes y televisión infantil 24 hs al día. ¿Se acuerdan cuando había que esperar al mediodía para que empezaran los únicos 4 canales por aire? Cuando finalmente llegaba la hora de la Familia Ingalls, Heidi, Meteoro... cuánto los disfrutaba! Y había que volver a esperar, a veces una semana entera, para ver qué pasaba "en el próximo capítulo".


Como la rosa del Principito, que es querida por ser única, cuidada y visitada, menos es más. Hoy llueve en Buenos Aires, y mis hijos juegan. En un mundo que acelera los procesos, jugar se esta perdiendo. Y no hablo de jugar a la Play, o en la computadora (que también tienen su lugar en nuestras vidas; pero lo limitamos), ahí donde todo esta servido. Hablo de jugar en serio. El tiempo de armar el Estanciero, o sus Legos, o al truco. Aguantarse la impaciencia que esos juegos no vienen preparados, sino que requieren de su tiempo, y lo que creo más importante, de su presencia.

Podemos salir de la vía rápida, ir a nuestro ritmo. Abrazar la simplicidad, nos dice Ban Breathnach. No fue nada fácil para nosotros; pero hoy veo sus frutos. Sigue siendo más difícil que lo que sería que ahora estuvieran enchufados a algo electrónico. Hay más peleas, justamente porque tienen que convivir. Y hay aburrimiento, claro. Pero es en ese aburrimiento donde surgen ideas a veces geniales, otras no tanto (quememos el avispero a ver que pasa)... Pero prefiero unas picaduras a mis científicos en potencia (que por suerte no sucedieron, ya no había avispas) a que no intenten vivir el mundo que los rodea.


Una agenda menos ocupada nos permite disfrutar de lo que sí decidimos colocar en esas horas en blanco. Mañana, uno de mis hijos cumple seis años, y toda la familia esta esperando para ir al cine (el que cumple decide cómo quiere festejar su cumpleaños, una tradición familiar que me encanta. Para los cumpleaños en época escolar, "faltamos" todos, y nos dedicamos a homenajear al cumpleañero). De ser una rutina sin valor, ir al cine pasó a ser algo ansiado.
Pienso de cuántas cosas más podre prescindir para hacer mi vida más simple, y por lo tanto, más rica. No necesito irme a otro lugar, ni convertirme a nada ni en nada, para lograr ese ritmo anhelado. Solo tengo que desearlo y cuidarlo.

martes, 18 de enero de 2011

El diario de agradecimientos


"La gratitud es la llave de la plenitud vital.

Consigue que lo que tenemos nos baste y nos sobre.

Convierte la negación en aceptación,

el caos en orden,

la confusión en claridad.

Puede hacer de una comida un festín,

de una casa un hogar,

de un desconocido un amigo.

La gratitud da sentido a nuestro pasado,

trae la paz al presente

y crea perspectiva de futuro."

Melody Beathe


La consigna de Ban Breathnach es simple: tener un diario en el que escribir cada noche cinco cosas por las que puedo estar agradecida ese día. Un "diario de agradecimiento". Si "la gratitud es la memoria del corazón", escribirla hace que registremos esos recuerdos en nuestra conciencia.


"La simplicidad, el orden, la armonía, la belleza y la alegría no brotarán ni florecerán sin la gratitud". La Naturaleza es sabia. La nutrición de una planta se da en las raíces. Es del suelo de donde toma los nutrientes que necesita para crecer. Agua y aire acompañan y completan su proceso; pero sin un suelo fértil, no sobrevive.


La gratitud es ese suelo. Lo vamos a remover cada noche durante al menos dos meses, al agregar esos detalles que dan alegría a nuestra vida. Vamos a ir sacando las malezas que lo cubran, ya que el agradecimiento va eliminando los pensamientos negativos.


Es real que hay una ley espiritual: cuanto más tengas y lo agradezcas, más recibirás. Ban Breathnach nos propone empezar por el suelo, y por dos meses, dedicarnos a nutrirlo. A la noche, empiezo a registrar qué me hizo estar agradecida, hoy.

lunes, 17 de enero de 2011

Balance vital


"No hay trompetas que suenen cuando tomamos decisiones importantes en nuestra vida.

El destino se da a conocer en silencio"

Agnes de Mille


Hacer un inventario de los factores positivos de mi vida. Estamos seguramente más acostumbrados a contar lo negativo en nuestra vida. Enfocarnos en eso que no podemos hacer, o tener, o ser. Cuantas veces dejamos de ver aquellas personas y cosas que nos hacen felices, y que tenemos justo frente a nuestros ojos.


E.E. Cummings decía "los ojos de mis ojos están abiertos." Si abrimos los "ojos de nuestros ojos", vamos a poder mirar nuestra vida desde otro lugar. Y agradecer lo que sí tengo (mi marido, mis hijos que ahora duermen, mi hogar, mis amigas, poder dedicarme a lo que me encanta, comida en la mesa, ese libro que me tiene atrapada, nuestro perro arruina canteros, mis sueños, mi salud, mi vida).


Para mí, el verano es cuando realmente ocupo mi casa. La miro. La vivo. La habito. Y de repente, tengo tiempo y energía para concretar proyectos postergados durante el año escolar. Sin horarios fijos, ordeno, descarto, regalo, arreglo, el verbo es acción. Sueños que se convierten en realidad.


Hay obstáculos que parece que nunca vamos a poder vencer y un día... ya no están. Y todo gracias a que nos decidimos a que ya no ocupen un lugar que no les corresponde. Puede ser talar ese árbol que no me permitía tener mi anhelada huerta, donar lo que ya no usamos, o soltar pensamientos y sentimientos que no me dejan tener la vida con la que sueño. Lo importante es hacer lugar para lo que sí elijo tener en mi vida.


"Cuando contemplé el libro de mi vida, me di cuenta que era muy afortunada" (Ban Breathnach) "mi voz interior concluyó que era imposible determinar mis ingresos netos personales a partir del saldo de mi cuenta corriente." Hagamos el balance de nuestra vida con los ojos de los ojos abiertos. Si hay cambios que realizar, empecemos. Un pequeño paso cada día.

jueves, 13 de enero de 2011

La escasez no existe


"Cuanto más simplifiquemos nuestras vidas, más plenas serán. La escasez no existe salvo en nuestras almas." (Ban Breathnach)


Las crisis económicas ponen en jaque lo mejor de nosotros mismos. De repente, lo económico sale de proporción, y nos quita energía, nos roba sueños. De a poco, nos concentramos cada día más en lo que no podemos hacer o adquirir, en vez de mirar lo que tenemos.


Hay otro tipo de crisis, como cuando estamos preocupados por un ser querido, que borran todas esas inquietudes diarias. De repente, nuestro foco se centra en este problema, y casi sin darnos cuenta, los números no rigen nuestra vida.


Es una lástima que necesitemos estos sacudones para despertarnos a lo que es realmente importante en nuestra vida. Como dice ese famoso dicho: "Nadie cuando se esta muriendo dice querría haber trabajado más..." En cambio, cuantas escenas Hollywoodenses nos traen a personas que en su despedida a sus seres queridos, se arrepienten de no haberles dedicado más presencia. Estar en el día a día de una relación, con nuestros hijos, parejas, padres, hermanos, amigos; incluso empleados y jefes. No ponernos en "piloto automático" como hace Adam Sandler en "Click", donde abusa del control remoto de su vida, y de tanto apretar fast forward en las situaciones que no lo dejan dedicarse a su ascenso profesional, termina perdiendo todo. Por suerte, se despierta, y todavía tiene otra oportunidad.


"El dinero viene y va en nuestras vidas. Lo que debería permanecer constante es la certeza de que la plenitud es patrimonio de nuestro espíritu" (Ban Breathnach). Miremos a nuestro alrededor, elijamos cómo queremos vivir cada uno de nuestros días. Para los chinos la palabra crisis quiere decir oportunidad de aprendizaje. Hoy la crisis económica es un fenómeno mundial, parece que hay una lección a aprender para cada uno de nosotros.
Vivir una vida más simple nos va a ayudar a concentrar nuestras energías en este ser querido que esta en crisis. Y si todavía no sos un ser querido para vos mismo, es momento de empezar a serlo.

miércoles, 12 de enero de 2011

Un cielo lleno de estrellas


Ningun pesimista ha descubierto nunca los secretos de las estrellas,

ni navegado a tierras inexploradas,

ni ha abierto un nuevo cielo para el espíritu humano.

Hellen Keller
¿Cómo hizo una niña ciega y sorda, en el siglo XIX, para llegar a ser escritora, oradora premiada, activista y feminista? Nunca perdió el optimismo. Tampoco lo perdió su maestra, Ann Sullivan, que aparece con ella en la foto. Tampoco lo perdieron sus padres, que se oponían a aceptar que su hija fuera "idiota" o "incapaz", que era lo que le pronosticaban a su hija Hellen. LLegaron a hablar hasta con Alexander Graham Bell y Mark Twain (referentes de la época), para ver quien podía ayudar a su hija a no quedar fuera del mundo.
En su autobiografía, Keller recopila anécdotas de cómo logro traspasar los muros de silencio y oscuridad que la envolvían, para con la ayuda de Ann, lograr comunicarse primero con su familia, y después, con el mundo. Y llegar a ser la primera persona ciega y sorda en obtener un título universitario. En la foto se la ve con la muñeca que Ann le regalo, para con suma paciencia deletrear una y otra vez la palabra "d-o-l-l" (muñeca) en la palma de su mano con golpecitos. Hasta que Hellen pudo relacionar que esos golpes eran "muñeca", y que las otras señas que Ann marcaba en su palma a la par que la mojaba con agua eran "agua". Cuando logró comprender que esas señas le permitían comunicarse con su familia, quizo aprender más, y más. Todo lo que Ann le pudo enseñar, y después, lo que el mundo tenía para ofrecerle.
Hellen Keller descubrió los sercretos de las estrellas, navegó tierras inexploradas hasta ese entonces para los que sufrían incapacidades como ella, y abrio un nuevo cielo para la humanidad: uno que nos dice que hoy, puede sucedernos algo bueno, sin importar lo que nos paso ayer. Sólo aferrarnos al pasado puede atarnos de pies y manos, y no permitirnos avanzar. Lo que pasó... pasó. Aprendamos lo que podamos aprender del pasado, y dejemos pasar el resto. Es muy peligroso manejar por la autopista de nuestras vidas, mirando sólo el espejo retrovisor. El optimismo es un hábito que se adquiere, quizas un poco más difícil de lo que se nos pega a veces el pesimismo de que "nada puede cambiar", o que "este país no me da oportunidades", o "no puedo cambiar".
Si aquella niña deshauciada por su época, pudo convertirse en una heroína de su tiempo, nosotros podemos ser los héroes y heroínas de nuestras propias historias. Se acuerdan del canto "Hoy puede ser un buen día, planteatelo así, aprovecharlo o que pase de largo depende de tí..." Serrat estaba en lo cierto: depende de mí, de cómo encaro cada cosa que me pase, hoy.

lunes, 10 de enero de 2011

Vivir cada día como si fuera el último

El esclavo Rebelde, Museo del Louvre, Paris

"Sólo cuando sabemos y comprendemos verdaderamente que nuestro tiempo sobre la tierra es limitado- y es imposible saberlo cuando nuestro tiempo se ha consumido- empezamos a vivir cada día con la máxima plenitud, como si fuera el único que tenemos." Elizabeth Kubler-Ross


"El Cielo tiene que esperar" era el título de una película en la que el protagonista volvía a la vida, porque sentía que se había muerto antes de su tiempo. Cuando llega, nuestro tiempo? Por algo la humanidad sueña con seres inmortales, que no necesitan despedirse de nada ni de nadie.


Kubler-Ross trabajaba con enfermos terminales, los acompañaba en esta etapa impensable, en la que los seres humanos se despedían de su vida terrenal. Su libro "Lecciones de Vida", nos dice que la vida es un escuela "con pruebas individuales y retos que superar". Hemos venido a aprender y a enseñar, y cuando hayamos aprendido todo lo que podemos aprender y hemos enseñado todo lo que podemos enseñar "volvemos a casa". Llama a vivir cada uno de nuestros días, y aprender varias lecciones: autenticidad, amor, de las relaciones, de la pérdida, del poder; de la culpabilidad; del tiempo; del miedo; del enfado; del juego; de la paciencia; de la rendición; del perdón, y de la felicidad.
Su lección final: "la mayoría de las personas tenemos todo lo que necesitamos para ser felices, pero no lo somos... lo que nos falta es una mayor experiencia interior... reconocer los dones y la bondad que poseemos". Cita a Miguel Angel, que sostenía que las esculturas que creaba ya estaban en el interior del mármol, que él solo quitaba con su cincel lo que sobraba, para revelar la maravillosa esencia que habia estado en su interior. Para Elizabeth (Kubler Ross) "nosotros hacemos lo mismo cuando aprendemos las lecciones de la vida: quitamos lo que sobra para revelar el maravilloso ser que hay en nuestro interior".


Cuando uno esta presente en su vida, comienza a tener revelaciones cotidianas, "ocasiones en las que podamos experimentar lo sagrado en lo ordinario". Vivir cada día, con la cabal conciencia que más allá de que haya otros días por vivir, no sera este. No sera el ahora. "Nadie se baña dos veces en el mismo río" decía Heráclito. Porque por más que vayamos todos los veranos al "mismo" río, ese ya no es el mismo en el que me bañe... recién. Abracemos el presente. Aprendamos. Enseñemos. Encontremos lo sagrado en lo cotidiano. Y a nuestro tiempo, volvamos a casa. Que si vivimos bien el hoy, no necesitaremos volver a vivirlo.

Necesidades y Deseos


"En la cadena de acontecimientos de mi vida,

nada ha sido accidental.

Todo tuvo lugar de acuerdo con una necesidad interior"

Hannah Senesh


La pirámide de Maslow nos enseña algo fundamental: hay que aprender a diferenciar mis wants (deseos) de mis needs (necesidades). Mi profesora de Economía Familiar fue categórica: No hay presupuesto familiar que pueda colmar todos los deseos de una familia. Además, nuestros deseos cambian permanentemente, gracias en parte al consumismo con el que convivimos. Para cuando adquirimos eso tan deseado ayer, hoy ya tenemos otro deseo insatisfecho.


"Si deseamos tener una vida feliz, creativa y realizada, es crucial hacer la distinción entre nuestras carencias y nuestras necesidades... solo después de tomar conciencia de nuestras necesidades interiores somos capaces de investirnos con la energía creativa necesaria para que se manifiesten en nuestras vidas" (Ban Breathnach)

No puedo conseguir todo lo que deseo; pero para estar satisfechos, necesitamos que nuestras necesidades esten cubiertas. No solo las fisiológicas (hambre, sed, un techo), sino también lo que ansiamos: contacto con otra/s persona/s; amar y ser amados; alimento espiritual y mental... Primero, hay que identificar nuestras necesidades, porque como dice Gertrude Stein "es inevitable; cuando se tiene una gran necesidad de algo, se encuentra... lo que necesitas, lo atraes" La pregunta es, entonces: ¿qué es lo que verdaderamente necesito?

domingo, 9 de enero de 2011

El Deber Ser... feliz!!!


"No hay ningún deber que más infravaloremos como el deber de ser felices"

Robert Louis Stevenson


La búsqueda de la felicidad se nos debe convertir en hábito. Para esto, hay que lograr limpiar nuestra mente de todas aquellas creencias con las que crecimos, que nos enseñaron que solo los egocéntricos egoístas andan por la vida procurandose su propia felicidad.


"Las semillas mágicas de la dicha están plantadas en lo más hondo de nuestro ser. La felicidad que el mundo no puede quitarnos sólo florece en el; jardín secreto de nuestras almas. Si cuidamos nuestro jardín interior y arrancamos de raíz las malas hierbas de las expectativas externas, estaremos alimentando nuestra auténtica felicidad de la misma forma que alimentaríamos algo que es bello y esta vivo. La felicidad es una emoción vital" (Ban Breathnach).


El "Jardín Secreto" es uno de mis libros preferidos. Al final de esta mágica historia, Mary Lennox, una huérfana recién llegada a Inglaterra desde la India, su primo enfermo y su tío viudo recuperan la felicidad, gracias a la tenacidad de los niños en recuperar un jardín secreto, que había pertenecido a la madre (y tía) fallecida. Hace unos años salió la película de la "clasica historia de un lugar donde crecen la magia, el amor y la esperanza".
Solo yo tengo la llave que puede abrir el portón de hierro hacia el jardín secreto de mi alma. Es momento de "arrancar de raíz las malas hierbas de las expectativas externas". Es momento de preparar la tierra, abonandola con aquellos pequeños placeres que me hacen feliz. Plantar nuestros sueños, y regarlos cada día con nuestros pensamientos y acciones... A su debido tiempo, nuestro jardín secreto se colmará de todo aquello que anhela nuestra alma. Nuestra vida estará colmada de nuestros proyectos, aquellos que hoy todavía nos parecen lejanos.
Los budhistas dicen que la infelicidad esta en nuestra mente. Sembremos entonces pensamientos positivos, rodeemonos todo lo que nos sea posible de experiencias y relaciones que nos hacen bien, descartemos de nuestra vida necesidades que no sean tales. Podemos nuestros pensamientos, como se poda una planta para que brote más fuerte. Y si es necesario, coloquemos un tutor para guiar nuestra mente hacia nuestros proyectos. Vale la pena ser feliz.

¿Soy feliz en este preciso momento?


"Tal vez si supieramos cuando somos felices,

sabríamos qué cosas son necesarias para nuestra propia vida"

Joanna Field, A Life of One's Own


Sabemos lo que nos hace felices, ¿no? La smujeres somos especialistas en saber qué hace felices a los demás. Si además somos madres, cuanto nos cuesta cumplir con ese viejo dicho "If Mama aint happy... ain't nobody happy!" "Si Mama no esta contenta... nadie esta contento!"... se nos enseño desde chiquitas que nuestra felicidad debía estar en hacer feliz al otro. Eso es lo que alguien "generoso" y de "buen corazón" hace.


Se lo que me hace feliz, hoy? Se me viene a la memoria esa escena de "Runaway Bride" en que Julia Roberts (la novia fugitiva) se sienta frente a cada forma posible de cocinar un huevo, a ver cual es el que le gusta a ella.


Pienso que importante es conocerse. Saber que pequeñas (y grandes) cosas me hacen feliz, hoy. Como la Sta Field hizo hace décadas, me propongo ir descubriendo cada día aquellos placeres sencillos que estan al alcance de mi mano, para poder disfrutarlos. "Consideremos nuestras preferencias personales y aprendamos a reconocer y luego abrazar momentos de felicidad que son únicamente nuestros."
La imagen es de Mary Cassatt "Young woman sewing in a garden", del Museo D'Orsay.

Morirse de sed en un río que me llega hasta las rodillas...


En el Día de Reyes, Ban Breathnach nos trae el regalo de darnos cuenta que poseemos todo lo que necesitamos para ser felices. No hay que esperar a cambiar de trabajo, bajar esos kilos que nos molestan, que los chicos crezcan, que el perro deje de destrozar mis canteros (OK, esto último seguro me haría mas feliz), ganar más plata, etc etc etc


Somos creadores de nuestra realidad, me enseño mi maestra Flavia. Si mis pensamientos estan llenos de "no soy feliz"... pues no lo seré. Hacer el inventario de lo que ya tengo, en lugar de lo que me falta, ayuda a concentrarnos en lo que nos hace felices. Elegir la abundancia, por sobre la escasez.
Tener todo un río a nuestra disposición no quiere decir que no nos podamos morir de sed. El río no nos obliga a beber de sus aguas, de la misma forma que nuestra alma no nos obliga a tomnar aquellas decisiones que saciarían nuestro bienestar físico, emocional, social.


"Saciemos hoy nuestra sed de "la buena vida" que creemos llevan los demás, tomando conciencia de lo bueno que ya hay en nuestras propias vidas"... Hoy agradezco la companía fiel de mi destrozador de canteros, echado a mis pies, seguro soñando con esas plantas que me habían llevado un año cuidar, y a él minutos (felicísimos a juzgar por el lío que armó) deshacer... Pero no lo cambiaría por el perro entrenado de ningún vecino.

jueves, 6 de enero de 2011

Soy quien quería ser?


Dicen que el alma, nos habla. A través de sueños, si los sabemos recordar ya despiertos. Otras veces, nos hace saber lo que necesita a través de nuestros anhelos. Estos mensajes del alma, no son faciles de escuchar. Por lo general, hay que estar en silencio del afuera. "Escucha los susurros de tu corazon" nos dice Ban Breathnach...


Y nos habla de "desplazamientos del yo", cuando nos miramos al espejo, y de repente no reconocemos nuestro propio reflejo. Puede ser que quien devuelve y sostiene nuestra mirada, es la mujer u hombre que podrias haber sido, si hubieras escuchado esos mensajes.


El alma habla. El cuerpo transmite sus mensajes, si lo escuchamos. Dolores de cabeza inexplicables, que si no callamos con analgesicos, vamos a entender que son tironeos entre mi alma y el afuera, que no la deja ser. "Tensiones" decimos. "El trabajo, los chicos, las cuentas". En realidad, esas cosas no nos tironearían, si estamos haciendo lo que amamos. Amamos lo que hacemos? Amamos en quien nos hemos convertido?


Richard Bach, otro de mis autores preferidos, en su libro "Uno", narraba las vidas paralelas de los protagonistas, segun que decisiones habian ido tomando en sus vidas. Tomar o no ese trabajo. Seguir o no en esa relación. Tener o no un hijo. Animarnos a dar ese paso que sentimos es cierto, para mi, hoy.


Es impagable la sensacion de poderse mirar en el espejo, y sostener la mirada. Cada decision me trajo donde estoy hoy, con las relaciones que mantengo, y las que ya no; con una profesión que se afirma cada día, no la que pense que iba a tener (abogada), pero seguro la que mi alma susurraba (madre, maestra, quiltera, artista, escritora, artesana, cocinera, orientadora, "amo mi casa" no ama de casa, como dice mi amiga Caro... y seguira creciendo hacia donde me lleven mis inquietudes, que por suerte, no son pocas). Aprendi algo importante en el camino: la vida no es lineal, como yo pensaba, sino circular. Cíclica. Ciclos que empiezan, continúan y terminan.... para empezar otros ciclos.


Ante el espejo, saludemos a aquel o aquella que querramos ser. Saludemosla/lo con la convicción que si damos los pasos adecuados, dentro de poco, su imagen y la nuestra, sera la misma.

miércoles, 5 de enero de 2011

La vida no es un ensayo general


Cuantas veces escuchamos la frase "la vida no es un ensayo general" mas conocida en ingles "life is not a dress rehearsal"....


Ensayo general, dos palabras que traen recuerdos (recientes o lejanos, de acuerdo a hace cuanto que no nos subimos a un escenario en la vida real) a disfraces, maquillaje, líneas a memorizar, actuación. Para muchos, actuar era el momento de dejar salir a mi verdadero yo. En la serie "Glee", es el jugador de football americano que se anima a cantar. O la chica menos popular, que arriba de un escenario, cautiva audiencias...


¿Pero que pasa cuando nos bajamos del escenario, las luces se apagan, el público se va? Seguimos siendo las actrices y actores principales de nuestra propia existencia. Cuando nos quedamos en el pasado, hechando culpas de que no fuimos esto o aquello porque nuestros padres no nos dejaron, o no nos enseñaron, o no, o no.... O le echamos la culpa al gobierno de turno, que no nos da esa oportunidad que cambiaría nuestra historia. O nos quedamos mirando el pasto (y la vida) del vecino, que siempre parece mas verde (y mas atractiva) que el nuestro... Es ahí cuando nos bajamos del escenario de nuestra vida, en plena función. El presente se nos escapa, doloridos por el pasado y aterrados por el futuro, nos olvidamos de prepararnos lo mejor posible para el HOY, el ahora.


No es fácil mantenerse sobre el escenario. Pero es imprescindible. Nadie debería recibir el papel protagónico de nuestra propia historia. Atrapemos el momento, surfeemos nuestra ola, digamos nuestras líneas, actuemos con los demás personajes que nos acompañan en el elenco mas o menos estable de nuestra vida. Lo único que es nuestro, es este momento. No hay ensayo general que dure toda la eternidad. En algún momento, llega ese momento, ansiado y temido: las cortinas se corren... acción!

martes, 4 de enero de 2011

6 hebras para una vida plena


"Existen 6 principios que nos guiaran en nuestro viaje exterior a lo largo del año próximo. Son las 6 hebras de una vida plena, las cuales, entrelazadas, conforman el tapiz de la dicha que nos envuelve de paz interior, bienestar, felicidad y sensación de seguridad.... gratitud... simplicidad...orden... armonía... belleza.... alegría... enhebra la aguja conmigo y da el primer punto en el bastidor de tu vida. Manten la calma y espera con expectación, sabiendo que la urdimbre y la trama de tu existencia cotidiana actual contienen las hebras doradas de un futuro de sencilla plenitud" (Ban Breathnach)

Que "coincidencia", empezar el primer día hábil de este 2011 con una reflexión que hable de hebras y puntadas. Yo amo las hebras, de todo tipo. Nuestro idioma español nos regala la magia de una sola palabra para exprear distintas realidades, mas similares de lo que aparecen a simple vista. Hebras de hilos, y hebras de té. Hebras que dejan de ser lo que son en origen, para fusionarse de tal manera que ya no son reconocibles en su individualidad; porque pasaron a conformar un todo que excede su singularidad.

En una trama textil cada puntada habla de concentración, de un plan a concretar... cada puntada es parte de un plan magistral, que a veces desde afuera de la cabeza del artesano, es difícil de entender.

Hay un cuento muy antiguo, donde una niña estaba sentada a los pies de su abuela. Su abuela, sentada en su mecedora, daba puntada tras puntada en su bastidor. La niña, mirando para arriba, despues de un rato no puede más y le dice "Abuela, la verdad es que tu trabajo te esta quedando rarísimo, y bastante feo. Lleno de puntadas cortadas... no lo entiendo" Y la abuela, con una sabiduría que trasciende ofensas, la invito a sentarse en su falda "Mira desde aca mi tapiz... ves la figura que esta emergiendo? Lo que pasaba, es que desde alla abajo, estabas viendo el reves de la trama... ahi donde nada tiene sentido..." La niña contemplaba maravillada pájaros exóticos, jardines, castillos y figuras humanas, que aparecían bajo la magia de la aguja dorada de su abuela...

A veces, cuanto no entendamos la trama de nuestra vida, es recomfortante pensar que la estamos viendo "desde abajo", sin tener la visión completa. Hoy, elijo empezar a tener esta visión más al comando de la obra que es mi vida. Empiezo a juntar los 6 principios que me guiaran: doy gracias por las experiencias de mi vida (buenas y malas) que me hacen quien soy, hoy... busco una vida más simple ... que me de orden... que me dara armonía... que me permitira apreciar la belleza que me rodea... que me abrira a su vez las puertas a la alegría.

Como dice Ban Breathnach, en todo tapiz bien hecho, uno no sabe donde empieza y termina cada puntada. Son pequeños pasos que juntos, forman la obra maestra. Cada pequeño paso dado con intención, sabiendo donde queremos llegar, va dando forma a ese tapiz que es nuestra vida.

domingo, 2 de enero de 2011

Amando las Preguntas




Dice Rainer Maria Rilke que intentemos amar las preguntas, sin intentar encontrar respuestas que quizás nos exceden... Vivamos las preguntas, hasta saber cuales merecen ser preguntadas.

Este es el encanto de un año nuevo, 12 meses en blanco, cuatro estaciones, 52 semanas por vivir... Un año entero para entender cuales son los sueños que merecen ser vividos hoy, a la edad que tengo, con quienes me rodean.

Sin apuros. Si erro la pregunta, no llego adonde realmente quiero llegar. Es fundamental conocer mis preguntas...

Me acuerdo de un trabajo en donde teníamos que crear en arcilla nuestro mayor anhelo, y una compañera hizo un signo de pregunta. ¿? Sólo eso.... incapaz aún de saber qué preguntaba su alma, supo que tenía que convivir con ese signo de pregunta.

Que cada uno ame sus preguntas. Ya llegaran las respuestas, a su debido tiempo.


Empieza el año de Transformación, Gozo y Descubrimiento...




En el hemisferio Sur, se aplica lo que la autora escribe en Julio: "adorable... con el murmullo evocador de las abejas en pleno vuelo y el olor a cremas bronceadoras. Cynthia Wickam"


"Caluroso, húmedo, sofocante... afloja el paso. O detente. Es el momento de dejar a un lado aspiraciones y expectativas, los desplazamientos en tren (o auto) al trabajo, indumentaria, teléfonos celulares, agendas... Nuestros deseos parecen menguar. ¿Sera porque nuestras necesidades estan cubiertas? Un rincón a la sombra, un refresco helado, una brisa fresca, dentro y fuera de casa. Una tregua en los rigores de la jornada. Tiempo libre para la buena conducta.El verano no es tanto una estación climática como una melodía, esa canción de complacencia que tarareamos a medida que los días empiezan a hacerse bellamente neblinosos. La búsqueda de la felicidad se convertira en nuestra prioridad personal este mes..."


Y le agregamos aquello con lo que los habitantes del hemisferio Norte empiezan el libro: "Y ahora demos la bienvenida al Año Nuevo colmado de cosas que nunca han existido. Rainer María Rilke"


"Enero, el mes de nuevos comienzos y entrañables recuerdos, nos aguarda... este es un mes para soñar, para pensar con ilusión en el año que comienza y el viaje interior"


Para mí, el comienzo de año siempre fue una época mágica. En horas, se evaporaba un año viejo, y aparecía entre estruendos y fuegos artificiales, un nuevo año calendario... lleno de posibilidades. Y mis vacaciones en la playa, Sierras o montañas, me encontraban agenda radiante en mano, pensando qué quería lograr ese año.


Mirando para atrás, siento que este es uno de los primeros años en los que no tengo nada que terminar... terminada la Universidad, las maestrías y especializaciones... mi familia estable... viviendo en mi lugar en el mundo, mi casa en Argentina... Este 2011, realmente esta impecable. Es mío, para hacer con él lo que mi Alma quiera.


No busco llenarlo de actividades. Miro mi calendario en blanco, como debe estar la nieve en el Norte del planeta, y por una vez, lo dejo fluir, como caen los copos de nieve, sin que nadie tenga que forzarlos. Dejo fluir el 2011, entregandome a este tiempo de forzado reposo, ya sea por calor o por frío, según donde estas palabras te encuentren, hoy. Al final, climas opuestos nos regalan lo mismo: quietud, reposo, introspección. Ideal para comenzar este viaje, no es cierto?


Manos a la obra. En un lugar tranquilo, donde no seamos interrumpidos (no es tarea fácil con niños dando vuelta, lo se), tomemos un diario creativo, que no es mas que un cuaderno con hojas en blanco, y escribamos nuestra primera entrada. ¿Cuáles son mis esperanzas para el futuro, reflexionando sobre los años pasados? En vez de un largo listado de lo que me propongo cambiar en este año nuevo, pienso en aquellos anhelos, bien escondidos en mi alma. Aquellos sueños que escondi esperando el momento correcto para decirlos en voz alta. Ese momento llego. Como dice Sarah (Ban Breathnach, a esta altura, la siento una amiga), es necesario creer. Creer que hay Algo o Alguien a quien encomendar mis sueños.


Cada uno lo llama como quiere. A mi me gusta llamarlo el Universo. Podemos llamarlo Dios, el Budda, el Profeta, Gran Espíritu, o como sea que cada uno lo reconozca. Algo o alguien que es capaz de ayudarme a cumplir con mis sueños. Pero para eso, es necesario decirlos, pedirlos. Creer que cada pequeño paso de este año nos va a llevar más cerca de eso que anhelamos: Paz? Armonía? Orden? Amor? Animarme a ser aquello que se que nací para ser (fotografa, madre o padre, artista, escritora, maestra, arquitecta)... Pero más importante que Hacer, es Ser.... Asi que, que queremos Ser en el 2011? Pacificos, armoniosos, amorosos, ordenados, armonicos?



Empezando por el principio


Margaret Young dice al principio del Prefacio "Con frecuencia, las personas pretenden vivir sus vidas al reves: intentan poseer mas cosas o más dinero para tener más posibilidades de hacer lo que quieren y de esta forma ser mas felices. En realidad, el proceso es a la inversa. En primer lugar, hay que ser uno mismo, luego hacer lo necesario para poseer lo que se desea".


En el Hemisferio Sur, es verano. Vacaciones de verano. Para mis hijos, significan casi 3 meses de días larguísimos, sin horarios, sin obligaciones. Pileta, pelota (tengo 4 varones, qué mas se puede esperar?), bicicleta, amigos y familia.


2010 fue un año económicamente difícil a nivel mundial, y Argentina no fue una excepción. Si esperamos a poder adquirir todas las cosas que el afuera nos dice necesitamos para ser felices... creo que mi familia y yo no lo vamos a ser nunca. Siempre va a haber ese "algo indispensable" que ir a adquirir.


Hoy, en mi impulso de disfrutar de lo simple, hornee pan. Harina, agua, levadura... y uau! la masa se transformo en el centro de la alegría de los míos alrededor de la mesa. Fuimos felices... con un pedazo de pan.
Como Mamá, hoy pude ver el valor de lo que hice. Miles de millones de otras veces, parece que son invisibles mis actos. Si el valor lo da la plata, entonces, mi vida vale muy poco. Por esto es tan importante para mí encontrar lo Sagrado en lo ordinario, lo Mistico en lo mundano, meterme de lleno en el sacramento del momento presente... Como dice Ban Breathnach "una existencia autentica es la forma más personal de adoración. La vida cotidiana se ha convertido en mi oración."
Religiones y prácticas personales aparte, la espiritualidad de honrar lo cotidiano nos hace, simplemente, más felices.

"Este libro, contiene 366 ensayos para cada día del año, para lograr que tu vida diaria refleje tu ser autentico. Desde elegir los vegetales o hierbas de tu huerta, establecer un lugar sagrado para meditar, y seguir el ritmo de las estaciones... adopta sus gentiles lecciones, animate a vivir su verdad apasionada, y comparti este regalo extraordinario con cada persona que encuentres: tu Ser Autentico es tu alma hecha visible"

Esta es la introducción al libro de Sarah Ban Breathnach "El encanto de la vida simple". Hace tiempo que me propuse encontrar el sentido sagrado de cada acto al parecer intrascendental. Mindfulness, estar presente... hoy, 2 de enero de 2011, con un año nuevo a estrenar, estreno tambien este espacio, para ir compartiendo cada una de estas recetas para "vivir en plenitud los pequeños placeres de la vida".

Mi propuesta es, valga la redundancia, simple: compartir los ensayos de este libro fascinante, junto con mis propias reflexiones. A los que quieran compartir este viaje conmigo, bienvenidos!